FIN DE SEMANA EN LA CALLE
A los extranjeros que visitan España les llama mucho la atención la calle. Y la cantidad de bares. Es seguramente la versión urbana moderna de la tradición mediterránea del ágora, de la plaza como lugar de encuentro. Y es que el “hobby nacional” es, sin duda alguna, hablar. Se habla en la calle, en los restaurantes, en las terrazas, con los amigos o con la familia. Y se habla generalmente en torno a una mesa, o en una barra de bar, casi siempre bebiendo o comiendo.
Los fines de semana mucha gente huye de las grandes ciudades. Son muchos los que tienen una segunda residencia, en el campo o en la playa. Muchas familias se reúnen en la antigua casa familiar, en el pueblo. El problema es la vuelta a casa el domingo. Sufrir un atasco impresionante para entrar en la ciudad es casi inevitable.
Los que se quedan en la ciudad salen. Y salen mucho. Por ejemplo, al mediodía, antes de comer, van a tomar el aperitivo. Un paseo, unas cañas y unas tapas en una terraza, al sol, son para muchos el máximo placer de un domingo. Luego, se come en familia, muy tarde, sobre las tres o pasadas las tres. Se come en la propia casa, en la de los abuelos, o en casa de los tíos o de los hermanos. O si no, en un restaurante.
Por las tardes hay larguísimas colas en los cines y las calles céntricas están llenas de paseantes.
Las noches de los viernes y de los sábados las ciudades están también muy animadas y hay tráfico hasta la madrugada: gente que va o que viene de los restaurantes, gente que entra o sale de los espectáculos y grupos de jóvenes que van a bailar o a tomar algo.
Otra de las cosas que puede sorprender al visitante es lo poco planificado que está el ocio. Muchas veces nos encontramos con alguien, sin haber decidido muy bien qué vamos a hacer. Nos citamos a una hora no muy exacta (“a eso de las nueve”, “sobre las diez”…) y luego “ya veremos”. Se toma algo en un sitio y, al cabo de un rato, el grupo se traslada a otro lugar, lo que también sorprende a muchos extranjeros. Y es que, para los españoles, es más importante con quién se está que dónde se está.
En los últimos años la práctica de deportes se ha puesto de moda y son muchos también los que organizan su tiempo libre y sus fines de semana entorno a su deporte favorito: la bicicleta o el tenis, el esquí o el golf, el “jogging”, el fútbol o la vela… Pero, ojo, siempre con amigos… Y hablando.